De: Juan Vegue
En general estoy de acuerdo con todas las acciones que obliguen a colocar en agenda política internacional las verdaderas necesidades ciudadanas para una vida digna donde se priorice el hábitat, la libertad, la salud, la seguridad y la educación como ejes del desarrollo humano. Sin embargo amigos me pregunto y les pregunto: ¿no es demasiado soberbio o desubicado pensar y creer que nosotros salvaremos al planeta? Realmente me cuesta creer que el futuro del planeta dependa del ser humano partiendo de la base de que somos nosotros los que necesitamos del hábitat para vivir y no el de nosotros para existir. Me cuesta entender tanta mentira política al servicio del mal o de los negocios políticos miserables a costillas del prójimo, tanta corrupción, tanta estupidez que caracterizan a nosotros los humanos quienes caminamos el planeta con una vida prestada temporalmente con fecha de inicio y terminación asegurada. Vean que quedo de Raúl Alfonsin, de Carlos Menem, de los militares, de Zanola y de tantos que ostentaron poder y se autodenominaron "la salvación" oportunamente. O que va quedando de aquel fresco muchacho Néstor Kirchner que decía ser el gran argentino que todo lo resuelve. Opino que lo perdurable es el planeta y las buenas acciones no la soberbia de la raza humana. Mal puede pensar el ser humano que salvara al planeta cuando no se puede salvar a si mismo. En lo personal creo que el planeta no corre ningún riesgo sino que nosotros somos tan hipócritas e inocentes a la vez que nos estamos autodestruyendo día a día por acción u omisión. Aquí y ahora el único que esta en riesgo de extinción somos los seres humanos por nuestro triste, egoísta y soberbio pensamiento humano. Finalmente cuando el planeta se sature de nuestra estupidez se reacomodara nuevamente destruyendo en segundos a todo lo que sea menos fuerte que el como ya lo demostró infinidad de veces con las catástrofes naturales en defensa propia y dando lugar a nuevas generaciones humanas que deberán empezar una vez mas en esta eterna empresa de saber vivir compartiendo los recursos para felicidad de la raza humana. Desde un humilde, solidario, tolerante y abarcativo escritorio argentino saludo atte.
Juan B. Vegué Centro Ciudadano "Nuestros Barrios" |
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